El magistrade Jesús Baena tenía 38 años cuando fue hallado muerto en su domicilio este lunes, en al menos 35 ciudades hubieron veladas y marchas por su abrupta desaparición.
Escribe Edith Ramirez – Conexión Vida.
Lima – Perú.- mediante un comunicado emitido por la fiscalía del estado de Aguascalientes, este unes se anunció que fueron localizados los cuerpos sin vida de Jesús Ociel Baena, magistrade y activista de la comunidad LGBTIQ+, y una persona de nombre Dorian Daniel Herrera, en el interior de una vivienda.
El hecho ha desatado la commoción e indignación del pueblo mexicano, en al menos 35 ciudades se realizaron veladas y manifestación pidiendo justicia por la muerte de Baena, para las Autoridades de Aguascalientes se trataría en un «crimen pasional», derivado a que las cerraduras no presentan “alteraciones en chapas, en ventanas”, en manos de uno de los cuerpos sin vida había un instrumento cortante, añadió la fiscalía, sin precisar la identidad de quien lo tenía. Esta es la versión que activistas y organizaciones rechazan tajantemente y piden a las autoridades realizar una investigación con perspectiva de género.
Decenas de personas salieron a protestar por el presunto crimen contra Baena, los asistentes gritaban “crimen pasional, mentira nacional” mientras cargaban velas, pancartas y banderas multicolor. Asimismo en la manifestación se aprovechó para reclamar por otros crimenes cometidos contra otros miembros de la comunidad LGTBIQ+.
El rechazo de los activistas ante la versión de las autoridades de Seguridad Pública de Aguascalientes se reflejó no solo en las calles, sino también en redes, donde el hashtag #CrimenPasionalMentiraNacional, fue tendencia.
Antecedentes
Previo al crimen, Jesús Ociel Baena Saucedo, integrante de un tribunal electoral de México había denunciado amenazas por su identidad no binaria.
A finales de julio pasado, reveló que las autoridades le habían otorgado medidas de protección ante “múltiples ataques” a su persona y “amenazas de muerte” en sus redes sociales.
Baena fue la primera persona en México que recibió un pasaporte que registraba la identidad no binaria.