Escribe: Edith Ramírez Romaina / Conexión Vida
Peligrosa propuesta de ley señala que son los padres de familia quienes deben evaluar y elaborar materiales educativos, pese a que dicha función está a cargo del Ministerio de Educación.
Lima – Perú.- Grupo conservador presenta proyecto de ley 904/2021 que fue aprobado por la Comisión de Educación del Congreso, este busca dar potestad a los padres de familia para evaluar y elaborar materiales educativos.
El promotor de esta propuesta es el legislador de Renovación Popular Esdras Medina, quien es rostro visible del colectivo ultraconservador «Con mis hijos no te metas», además habría indicado en su hoja de vida que administra el colegio privado Belen Kids, desde el 2018, por lo que se presume un conflicto de intereses.
¿QUÉ BUSCA EL PROYECTO DE LEY 904?
Según el proyecto de ley 904, a través de las APAFAS, los padres podrían tener injerencia sobre el contenido en los textos, materiales y recursos educativos. El proceso iniciaría con una consulta previa a los padres, y luego el Minedu remitiría el material educativo.En el Artículo 5.1 se señala que «los funcionarios y servidores civiles del sector educación no podrán aprobar o publicar materiales, textos ni recursos educativos cuyo contenido vulnere los principios previstos en el artículo 2 o que en cuya elaboración no hubieren participado los padres de familia, conforme a los términos previstos en esta Ley». La propuesta será evaluada en los próximos días.
IMPACTO NEGATIVO
El proyecto de ley vulneraría el rol autónomo del Ministerio de Educación, así como los avances en educación igualitaria.
Según la Defensoría del Pueblo, en el 2021 la cifra de embarazos en menores de 10 años se triplicó en comparación al 2019.
Respecto a VIH las cifras no son muy alentadoras, según el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades-Ministerio de Salud del Perú, hasta diciembre del 2021, los casos de jóvenes de 15 a 19 años viviendo con esta condición alcanzarían más del 7%, la cuál es una cifra reveladora pues indicaría que los jóvenes mantienen practicas sexuales sin protección.
En ese sentido, Victor Sotelo Reyes, director de Sí, da Vida, indicó «es muy probable de que mucha información que hoy en día es muy necesaria, como el tema de la prevención de los embarazos no deseados, así como la prevención de infecciones de transmision sexual como el VIH puedan verse sesgadas por no permitir que se enseñe métodos de prevención» Resaltó que muchos jóvenes están explorando su sexualidad y es algo que se debería reconocer, además de que es importante brindar a los jóvenes las herramientas necesarias para cuidarse y así puedan vivir una vida sexual sana y plena, además de reconocer su identidad.
COLECTIVOS SE PRONUNCIAN
La organización Promsex se pronunció vía twitter, manifestando su descontento por la iniciativa de Medina, señalando que la única entidad competente para elaborar contenido curricular escolar en el Ministerio de Educación.
Por su parte la institución Flora Tristán también manifestó su postura, señalando que «las y los adolescentes requieren acceder a información clara sin mitos, estereotipos, prejuicios o miedos« finalmente exhorta a los congresista a oponerse a propuestas legislativas que perjudican la educación de millones de niños y niñas y adolescentes.
¿QUÉ BUSCA LA EDUCACIÓN SEXUAL INTEGRAL (ESI) Y CUÁLES SON SUS BENEFICIOS?
La educación sexual integral es un derecho y un proceso de enseñanza basado en planes de estudios sobre los aspectos cognitivos, psicológicos, físicos y sociales de la sexualidad. Su propósito es dar las herramientas necesarias a los niños, niñas y adolescentes para que puedan ejercer su derecho a disfrutar de salud, bienestar y dignidad, y así puedan entablar relaciones sociales y sexuales basadas en el respeto. Fuente UNESCO
BENEFICIOS
- La educación en sexualidad tiene efectos positivos, entre ellos un aumento del conocimiento de los jóvenes y una mejora de su actitud en lo que respecta a la salud y los comportamientos sexuales y reproductivos.
- La educación en sexualidad, tanto en la escuela como fuera de ella, no aumenta la actividad sexual, el comportamiento sexual de riesgo o los índices de ITS y VIH