En primera instancia Poder Judicial sentenció a dos médicos a un año de prisión condicional por el delito de lesiones culposas graves por caso de negligencia médica contra Filiberta Aliano Palpa y a la clínica La Luz al pago de 50 mil soles, pero todo ha sido archivado.  

Escribe: Marlon Castillo Castro / Conexión Vida 

Lima, Perú.- En una cadena de negligencias e impunidad se ha convertido la muerte de Filiberta Aliano Palpa (68), madre de familia que en el 2017 quedó inmovilizada por completo después que la llevaron a la clínica La Luz, por un dolor abdominal y terminó con cuadriplejía y encefalopatía hipóxica isquémica por no haber recibido oxígeno, falleciendo en el 2021 en el hospital Dos de Mayo.

Contra todo pronóstico y faltando dos meses para que el vencimiento real del caso, la Primera Sala Penal Liquidadora de la sede Zavala, generó la prescripción de todo el proceso, borrando de manera súbita la sentencia de octubre de 2021 en la que se establece la negligencia médica y se le da un año de prisión suspendida a los médicos Juan Pedro Carassa Lindo y Roxana Luz Rejas Palza por el delito de lesiones culposas graves.

Además en la resolución firmada por el presidente de la sala Lazarte Fernández y los jueces superiores Saquicuray Sánchez y Hayakawa Riojas, se elimina el pago de reparación de 50 mil soles a la Clínica La Luz, cuyo propietario, el chotano Fermín Silva Cayatopa es amigo del presidente de la República Pedro Castillo. 

“Todo ha quedado impune. No entiendo por qué han prescrito el caso de mi madre si el plazo se vencía el 28 de julio, ya que todos los procesos judiciales se les dio más tiempo durante las cuarentenas del Covid-19, incluso en la Resolución que se tuvo antes se indicó esa fecha”, expuso indignado Juan Ollero, hijo de Filiberta.

Resolución que da cuenta que por motivos de las cuarentenas obligatorias por Covid-19  se extienden los plazos judiciales.

Con la medida, el caso queda archivado y el personal de salud que le ocasionó el daño a  Filiberta no sólo queda libre de la pena, sino se solicita se anule cualquier antecedente judicial que pudieran tener con el fin que sigan ejerciendo su profesional, pudiendo afectar a otros pacientes y usuarios.

Por ahora sigue el caso por la vía civil, el cual es un proceso engorroso que Juan Ollero lleva por más de 5 años, en el que la familia ha tenido que gastar dinero, tiempo y soportar maltratos. Para iniciar el proceso de investigación de la negligencia médica, debieron pasar varios meses, ante el insólito pedido de la Superintendencia Nacional de Salud – Susalud- en el que solicitaban que de manera presencial su hermano acuda a una notaría y firme una carta poder, pese a conocer que reside en Argentina. Este caso en  Susalud, estuvo a punto de prescribir, pero con la presión mediática se logró tener un fallo a tiempo. 

HISTORIA DEL CASO

La modesta vida de la familia de doña Filiberta Aliano, cambió el 26 de agosto del 2017, cuando la llevaron a la clínica La Luz, por un dolor abdominal y terminó inmovilizada para toda su vida a consecuencia de una  negligencia médica.

Filiberta hizo cuadros de convulsiones severos que no le permiten valerse por sí misma y logró sobrevivir por casi 4 años en ese mismo estado con un ventilador mecánico en el hospital de emergencias Casimiro Ulloa y luego en el Dos de Mayo. 

Pese a la situación el hijo de la anciana, acudió a los encargados de la Clínica La Luz, quienes le prometieron ayuda a cambio de no hacer visible el caso a la prensa, pero se han desentendido del problema. Incluso al ver la complejidad médica, lo indujeron a afiliarla al Seguro Integral de Salud (SIS) y evitar pagar los gastos de hospitalización que requería la usuaria en el Casimiro Ulloa.

En el 2018 la familia de Filiberta realizó un plantón en las afueras de la clínica La Luz para exigir justicia para doña Filiberta y pedir a la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) agilice la investigación de la denuncia.

Juan Ollero, hijo de Filiberta protestando fuera de la clínica en el 2018 // Foto: Marlon Castillo
Juan Ollero, hijo de Filiberta protestando fuera de la clínica en el 2018 // Foto: Marlon Castillo

Además, el Gerente General de la Clínica La Luz, Manuel Óscar Novoa Gómez,acusó a Juan y su hermana Bertha Ollero de hostigamiento y la prefectura le otorgó el impedimento que los familiares se acerquen al funcionario de la clínica, impidiendo de esta manera que accedan a la  ayuda prometida que necesitaron para cubrir gastos médicos de doña Filiberta.

Aquí el video del caso luego de ocurrido la negligencia médica en agosto de 2017. Cuatro años después, Filiberta falleció. 

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