Fospa culmina con el claro objetivo de visibilizar la agenda política de las organizaciones de la Panamazonía, así como de articular la agenda de los movimientos sociales y otros actores que actúan en este espacio.
Tarapoto, Perú.- Con la lectura de la Declaración de Tarapoto, culminó ayer en la ciudad de Tarapoto, el VIII Foro Social Panamazónico (FOSPA) que reunió a más de mil representantes de siete países de la región, y de otros continentes, y que marca, según explica el citado documento, el inicio de importantes acciones de defensa y vigilancia de la Amazonía y sus pueblos, que sufren los constantes daños y delitos propiciados por el actual “modelo de desarrollo extractivista”.
En conferencia de prensa, Teresita Antazú, lideresa del pueblo indígena Yanesha, de Perú, destacó la creación de un Tribunal a favor de los derechos de las mujeres panamazónicas y andinas, como uno de los aportes más novedosos del evento y que, aseguró, tendrán su réplica en los siguientes Foros.
“Agradezco que en este espacio haya sensibilidad para tocar este tema”, dijo Antazú, en alusión a los casos expuestos en el tribunal, sobre violaciones a los derechos humanos de las mujeres indígenas.
Por su parte, Ismael Vega, del Comité Internacional que organizó el Foro, destacó que el evento cumplió con su objetivo de “visibilizar la agenda política de las organizaciones de la Panamazonía”, así como de articular la agenda de los movimientos sociales y otros actores que actúan en este espacio. En ese sentido, remarcó que se apunta a que estos espacios se conviertan en “instrumentos de presión política hacia los Estados en defensa de la Amazonía y sus pueblos”.
En otro momento, recordó que el contenido de la Carta de Tarapoto, “recogió de manera amplia, participativa y democrática los aportes de los cuatro días de trabajo, así como los aportes de los preforos nacionales que se organizaron en diversos países” de la región. Finalmente, destacó como una respuesta al actual modelo, entre otras, el impulso que se le debería dar a los autogobiernos indígenas que están surgiendo en la región amazónica y que marcan el inicio de nuevos procesos en defensa de la Panamazonía.
A su turno, Peggy Tuanama, del Comité Local organizador del VIII FOSPA, calificó de “exitoso” el evento por la gran convocatoria que tuvo. Diana Aguilar, de la organización del FOSPA anterior, que se desarrolló en Macapá, Brasil, destacó los resultados del evento en Perú y calificó la Carta de Tarapoto de “hoja de ruta” para los próximos encuentros.
Finalmente, Lola Camayo, de Colombia, saludó que se haya elegido a su país como sede del IX FOSPA, y sostuvo que esto servirá para dar a conocer los problemas de su país. “Esperamos que la naturaleza nos dé fuerza y sabiduría para sacar adelante este FOSPA”, sentenció. Cabe precisar que la Carta de Tarapoto, a la cual se le dio lectura hoy al final del evento, recibirá aportes en los próximos días, y que una vez concluido ese proceso se hará pública.