Los autores del estudio calcularon que por cada 365 días adicionales que las mujeres vivían con depresión el riesgo de mortalidad por cualquier causa aumentaba un 72%.
La depresión es un trastorno de ánimo, una sensación de tristeza o aflicción de intensidad más profunda. Algunas de las causas pueden ser acontecimientos de la vida diaria, cambios químicos en el cerebro, efecto secundario de ciertos medicamentos, diversos trastornos físicos.
Se han realizado diferentes estudios los cuales han demostrado que la depresión se asocia con un mayor riesgo de mortalidad entre las personas con VIH, se estima que entre el 20% y el 40% de las personas padece este trastorno del estado de ánimo siendo la incidencia más elevada entre las mujeres (entre un 30 y 60%). Existen varias maneras en que padecer de depresión aumenta el riesgo de muerte: disminuyendo el cumplimiento de las visitas médicas, que las personas no se mantengan comprometidos en su cuidado, que se olviden de tomar sus dosis de los medicamentos.
Investigadores recomiendan hacer seguimientos de manera más frecuente a aquellas personas con depresión, ya que podría convertirse en riesgo de muerte
Investigadores del Estudio Interagencias sobre VIH en Mujeres (WIHS) diseñaron un estudio para determinar el efecto de la carga acumulativa de depresión sobre la mortalidad por cualquier causa entre las mujeres inscritas. En total participaron 818 mujeres que iniciaron el tratamiento antirretroviral a partir de 1998.
Las mujeres estuvieron en seguimiento un aproximado de 4,8 años lo que sumó un total de 3.292 persona-años. En el transcurso de este periodo hubo un total de 94 muertes, lo que representó una tasa de mortalidad de 2,9 muertes por cada 100 persona por años. Del total de la población de estudio, el 53% tuvo depresión en algún momento del periodo de seguimiento.
Las mujeres que murieron habían pasado un mayor número de días con depresión que aquellas que continuaron en seguimiento hasta el final del estudio (435 días y 355 días, respectivamente). Los autores del estudio calcularon que por cada 365 días adicionales que las mujeres vivían con depresión el riesgo de mortalidad por cualquier causa aumentaba un 72%.
Los investigadores recomiendan que es muy importante hacer seguimientos de manera más frecuente a aquellas personas con depresión e implantar programas de cribado y atención de este trastorno, dado que tiempos acumulados inferiores a 6 meses viviendo con depresión ya se asociaron al aumento del riesgo de mortalidad.
(fuentes Gttvih.com / aidsinfonet.org)