Voceros de colectivos de pacientes, piden iniciar comisión para crear sistema de salud que beneficie a los pacientes y usuarios evitando corrupción en el sector
Escribe: Marlon Castillo / Conexión Vida
Lima, Perú.- Tras el destape de actos de corrupción, los “negociazos” y un Seguro Integral de Salud (SIS) que se cae a pedazos, los pacientes salen a las calles para exigirle al Estado y al Ministerio de Salud, una reforma integral del sistema de salud, que acabe con los desabastecimientos de medicamentos, las largas colas, la falta de médicos, los equipos malogrados y castigue a los malos funcionarios que se enriquecen a costa de las personas que tienen algún tipo de dolencias.
Para ello han organizado un plantón este jueves 27 de octubre desde las 10:30 a.m. en el frontis del MINSA, y no solo participaran los pacientes sino también representantes de colegios y gremios profesionales, colectivos de jóvenes, organizaciones de la sociedad civil que trabajan en temas de salud y público en general que rechazan los actos de corrupción tanto en el SIS como en todo el sector salud.
La convocatoria se realiza via facebok y twitter, mediante el hashtag #LaCorrupcionMata.
Demandas en VIH
Entre las demandas de los pacientes, se encuentra el tema del VIH, donde no hay insumos y reactivos para las pruebas de laboratorio esenciales para el control y tratamiento de las personas afectadas. Incluso niños nacidos de padres que viven con la infección crónica, no reciben leche maternizada para evitar la transmisión del virus a los menores.
Incluso, existen dos denuncias ante la Fiscalía de Prevención del Delito por falta de ampollas para controlar la infección oportunista denominada citomegalovirus que por lo general es un síntoma de la baja de defensas en las personas que se encuentran en fase Sida.
Hay que resaltar que el MINSA pagó en agosto pasado más de 18 soles por cada tableta de Atazanavir, medicamento utilizado para el tratamiento de VIH, cuando el mismo medicamento del mismo laboratorio Bristol cuesta 1.35 soles en países como Brasil o Bolivia. Es decir, desde hace 4 años consecutivos se viene pagando entre 13 y 24 veces más por este medicamento, sobregastando millones de soles que pueden ser utilizados para otras cosas del sector.
