Una dosis de refuerzo de la vacuna sería efectiva contra el covid-19 y las variantes del nuevo coronavirus, así lo informó Pfizer en un documento entregado a la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE.UU.
Con información de France Press y FDA
Estados Unidos.- Esta mañana, Estados Unidos confirmó que ofrecerá una tercera dosis de la vacuna contra el Covid-19 de las marcas Pfizer, BioNTech o Moderna y Johnson & Johnson (J&J) a su población debido a los estudios que prueban que los inoculantes pierden efectividad con el paso del tiempo. Sin embargo, horas después voceros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aclaró que todavía no hay estudios para demostrar que la dosis de refuerzo sea necesaria.
El 12 de agosto, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. FDA autorizó el uso de emergencia (EUA) tanto para la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 como para la vacuna Moderna COVID-19 para permitir el uso de una dosis adicional en ciertos individuos inmunodeprimidos, específicamente, sólidos receptores de trasplantes de órganos o aquellos a quienes se les diagnostica afecciones que se considera que tienen un nivel equivalente de inmunodepresión.
Según la Universidad Johns Hopkins, en la última jornada se registraron 658.724 nuevos contagios de coronavirus, lo cual eleva el total de casos a más de 208,8 millones en todo el mundo. Además, se han producido 4,38 millones de decesos desde el inicio de la pandemia.
El miedo a la presencia de distintas variantes del Covid-19 como la Delta ha hecho que los Ejecutivos de todo el mundo se replanteen buscar más protección para su población. En esta línea, el Gobierno de Estados Unidos anunció que aplicará una tercera dosis de la vacuna como «refuerzo» ante el virus a sus ciudadanos a partir del próximo 20 de septiembre.
Por el momento, la Administración de Joe Biden ha señalado que aquellos que hayan recibido dos dosis de los inoculantes fabricados por los laboratorios de Moderna y de Pfizer-BioNTech hace al menos ocho meses podrán aplicarse un recordatorio del antídoto, luego de que varios estudios probaran que las vacunas pierden efectividad con el paso del tiempo -y sobre todo frente a nuevas variantes-.
No obstante, se espera que también se administre una segunda dosis extra a aquellos que recibieron la vacuna monodosis de Johnson & Johnson, la tercera y última aceptada por el Gobierno estadounidense.
«Los datos disponibles dejan muy claro que la protección contra el contagio por el SRAS-CoV-2 empieza a disminuir con el tiempo (…) Y, en asociación con el predominio de la variante Delta, estamos empezando a ver pruebas de una menor protección contra la enfermedad leve y moderada», aseguraron los representantes de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) este miércoles.
Estados Unidos no es la única nación que ha decidido aplicar una dosis extra a su población, ya que otros países como Israel, Francia, Alemania y Chile también se han decantado por ofrecer una tercera vacuna a los adultos mayores y a las personas con sistemas inmunitarios débiles en las últimas semanas. Una decisión controvertida a su vez, debido al beneficio multimillonario que esto supone para las farmacéuticas a cargo de las dosis.
La OMS replica que no se ha demostrado que la tercera dosis sea necesaria
Justo después del anuncio del Gobierno de Estados Unidos, la Organización Mundial de la Salud reiteró una vez más que no considera que sea necesaria una dosis de refuerzo de la vacuna contra el Covid-19, aunque no se refirió en concreto a la decisión estadounidense.
“Creemos claramente que los datos de hoy no indican que se necesiten refuerzos”, indicó este miércoles la científica jefe de la OMS, Soumya Swaminathan, en una conferencia de prensa en Ginebra, Suiza. La médica agregó que se requiere más investigaciones al respecto.
Swaminathan reiteró un mensaje que ya ha dicho la OMS antes: las personas más vulnerables en todo el mundo deberían estar completamente vacunadas antes de que los países de altos ingresos comiencen a aplicar una tercera dosis a sus habitantes. Y es que, según los cálculos de la científica jefe, si todos los países de ingresos altos deciden aplicar una tercera vacuna a sus habitantes de más de 50 años, eso requerirá que se utilicen al menos mil millones de dosis para el refuerzo.
“Hay suficientes vacunas en todo el mundo, pero no llegan a los lugares correctos en el orden correcto”, agregó Bruce Aylward, el asesor principal de la OMS.
A este llamado se sumó el director del Organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien explicó que 10 países han aplicado el 75% de las vacunas contra el Covid-19 que hay disponibles en todo el mundo. En contraste, los países de bajos ingresos solo han vacunado al 2% de su población, según las cifras del director.