Lima, Perú.- Se repite la historia. Según un documental narrado por el exbaloncestista estadounidense, considerado uno de los mejores de la historia Magic Johnson, en el año 1991 tuvo que adelantarse a confesar que tenía VIH, pues su diagnóstico se filtró a los medios de comunicación y para no generar mayores especulaciones, tomó el valor de decirlo al mundo entero, sin embargo en pleno siglo XXI cuando se conoce más sobre el VIH y su diferencias con el Sida, los medios de comunicación de los Estados Unidos, han vuelto a escarbar en la vida de un personaje conocido para que posiblemente cuente su diagnóstico, debido a varias noticias especulativas que circulan en todos los medios hace unos 15 días atrás.
Antes que se conociera que podría tratarse del actor Charlie Sheen, que de acuerdo al portal de farándula TMZ revelaría este martes en una entrevista con la televisión que es VIH positivo, se le acusó de ser un hombre promiscuo y que acudía a servicios de trabajadoras sexuales y consumo de drogas.
Si bien el VIH, sobretodo en nuestro país, más del 90% se transmite por la vía sexual, en otros países una de las vías también son por intermedio de las transfusiones sanguíneas o contacto con agujas en personas drogodependientes.
Consideramos oportuno que los medios de comunicación deben apelar más a la información y prevención del VIH, antes que alimentar el propio morbo para arrinconar a una estrella a confesar una condición crónica de salud, que sólo compete a su esfera privada y que depende de la persona si decide o no contarlo.
Cabe recordar que en el Perú existe una ley que protege la confidencialidad del diagnóstico, ley 26626 y su modificatoria 28243.
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