Promotora de salud y activista trans, aún no encuentra justicia, pese a ataques homofóbicos que casi acaban con su vida.
Escribe: Tyra Guicchetti Chavez / Conexión Vida
Lima, Perú.- Después de trabajar como siempre lo hacía en su labor de promotora de salud Jefri Peña Tuanama, mujer trans, fue atacada por hombres que salían de un bar en octubre de 2007. José Marcial Ybias Altamirano y Henry Alberto Gamboa Huamán, dos policías en actividad, de servicio en la zona observaron la agresión, pero increíblemente; no detuvieron a los atacantes y se negaron a ayudarla.
12 años después, el Ministerio Público acusó a los policías por lesiones graves, un delito menor, y el Poder Judicial ayer condenó a los efectivos por este delito, a 4 años de prisión suspendida y al pago de una reparación civil de 50 mil soles.
Lo que queda como realidad es que el Estado Peruano no protege a las personas trans, y que, además, protege impunemente a quienes han cometido graves crímenes contra las personas gays, trans lesbianas y bisexuales.
Hace dos días (22 de julio) se ha incorporado una contundente prueba más para reforzar el pedido de Justicia y exigir que el Estado peruano responda, por ser el responsable del salvaje ataque, el intento de asesinato, y también de la impunidad en este caso.
Hay que tomar en cuenta que las Naciones Unidas lamentó que el Estado Peruano no haya hecho lo que por justicia debía de hacer, en el caso de Yefri.
Esperamos que esta vez, Yefri alcance la justicia y que el Estado Peruano de una vez ejecute políticas públicas con enfoque de género; y proteja realmente a las personas LGBT y castigue ejemplarmente cualquier acto de violencia más contra ellas.
Sufrió ataque homofóbico
El 7 de diciembre del año pasado Jefri sufrió una salvaje agresión a pocas cuadras de su casa en Ate Vitarte.
En diálogo con Conexión Vida, en aquella oportunidad comentó que fue a comprar a una panadería cerca de su vivienda en la zona de Huanchihuaylas y al salir del local, un sujeto con una piedra la atacó propinándole golpes en la cabeza y desangrándola. El agresor fue identificado como Gino Santana Soller, pero se dio a la fuga.
“Estoy con mi cabeza rota, mis rodillas hinchadas y mis caderas, no me siento bien, acabo de poner la denuncia”, indicó la activista trans.
Precisó que al momento del ataque el sujeto le lanzó insultos como “cabro, vas a morir”. El caso sigue en investigación.