Un informe de la Contraloría revela que SENASA permitió el ingreso de más de 5 mil toneladas de alimentos con sustancias peligrosas, debilitando sus propios controles sanitarios y exponiendo a la población a riesgos de salud.
Lima – Perú.- Una auditoría de la Contraloría General de la República ha revelado que el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA) permitió el ingreso de más de 5 mil toneladas de alimentos y piensos contaminados sin realizar los controles sanitarios adecuados. Esta situación compromete la seguridad alimentaria del país y expone a la población a sustancias tóxicas y microorganismos peligrosos. La información se basa en un informe publicado por Salud con Lupa, que detalló los hallazgos de la Contraloría.
Modificaciones normativas sin sustento técnico
El informe señala que, entre 2021 y 2022, SENASA omitió aplicar el Reporte de Inspección y Verificación (RIV), un procedimiento que garantizaba la calidad de los productos importados. Esta omisión permitió el ingreso de alimentos contaminados con plaguicidas, metales pesados y bacterias como Salmonella y Escherichia coli.
Además, en septiembre de 2023, SENASA modificó el Procedimiento Administrativo N° 9 mediante la Resolución Jefatural N° 200-2023-MIDAGRI-SENASA, eliminando la obligatoriedad de los análisis de laboratorio para ciertos productos, sin sustento técnico ni legal. Esta modificación se realizó sin respetar la jerarquía normativa, ya que un Decreto Supremo había establecido previamente estos controles.
Alimentos contaminados detectados
| Maíz amarillo con residuos de clorpirifos. |
| Lentejas con restos de fipronil. |
| Frutas (manzanas y naranjas) con exceso de agroquímicos. |
| Arvejas importadas con plomo en concentraciones superiores a lo permitido. |
| Carnes de pollo y cerdo contaminadas con Salmonella y Escherichia coli. |
| Carne de res con residuos de arsénico. |
Funcionarios responsables y acciones recomendadas
La Contraloría identificó a varios funcionarios involucrados en estas irregularidades, incluyendo al exjefe nacional de SENASA, Janios Miguel Quevedo Valle, y a otros altos cargos responsables de la modificación del reglamento y la omisión de controles.
Ante estos hallazgos, la Contraloría recomienda:
- Restablecer los controles sanitarios y la obligatoriedad de análisis de laboratorio.
- Sancionar a los responsables de las irregularidades detectadas.
- Fortalecer la supervisión en puertos y fronteras para evitar el ingreso de alimentos contaminados.
La seguridad alimentaria es un derecho fundamental y debe ser garantizada por las autoridades. Es urgente que SENASA corrija estas fallas para proteger la salud de la población y evitar nuevos riesgos sanitarios.
