Escribe: Renato Arana Conde – Conexión Vida
Ante cuestionamientos de la sociedad civil por la disminución presupuestal para programas para VIH, el Minsa modificó su presupuesto por 15 millones de soles que da la falsa idea de un incremento en el financiamiento para este año. Conoce de qué se trata esta maniobra de dinero.
Lima, Perú.- El año pasado, 6 mil 592 personas en el país se enteraron, mediante un diagnóstico médico, que tienen VIH, de acuerdo con el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades del Ministerio de Salud. Fueron 1201 personas más respecto al total diagnosticado en 2020: 5 mil 391 casos.
Pese a esta situación, el Ministerio de Salud –en ese entonces bajo la gestión de Hernando Cevallos– decidió en plena emergencia sanitaria recortar 128 millones con 300 mil soles del presupuesto para atención y prevención del VIH y tuberculosis (pliego presupuestal 0016) destinado para este año 2022.
Se trata de una reducción del 45% respecto a 2021 que, por lógica, empeorará las condiciones de la población con VIH que se hallaban seriamente afectadas en plena pandemia, lo que se tradujo ese año 2020 en 34 % de reducción en la detección de nuevos casos de diagnósticos positivos, 60 % de usuarios menos que se enrolaron al tratamiento antirretroviral y el abandono a la misma aumentó en 17 %.
Ante la avalancha de críticas por parte de activistas y organizaciones de la sociedad civil, el Ministerio de Salud –ahora dirigido por el cuestionado Hernán Condori Machado– aprobó el 10 de febrero último, mediante resolución secretarial (027-2022/MINSA), la transferencia de 15 millones 527 mil soles que, en apariencia parecería un leve incremento al presupuesto para VIH y tuberculosis.
Sin embargo, para más exactitud, en la modificación presupuestaria, se evidencia que en realidad solo se transfirió la cifra destinada a “monitoreo, supervisión, evaluación y control del VIH/Sida a otras dos actividades, pero de la misma categoría presupuestal (la 0016: TBC-VIH/Sida) como “Servicio de atención integral a personas con diagnóstico de VIH” y “Tratamiento oportuno para tuberculosis” con 12 millones 838 mil soles y 2 millones 688 mil soles, respectivamente”
Una transferencia que no resuelve recorte de presupuesto para VIH
Para Julia Campos Guevara, integrante de la Coordinadora Nacional Multisectorial en Salud (CONAMUSA) este movimiento de dinero es preocupante pues aún se desconoce si el presupuesto actual de 157 mil millones de soles para este 2022 será suficiente para cubrir las necesidades para los programas para VIH y tuberculosis y más aún en plena emergencia sanitaria que ya significó una serie de trabas para el acceso a servicios médicos indispensables para los usuarios con VIH.
“Que no se crea que ha habido un aumento en el presupuesto y que es algo bueno; sino que, en realidad, en el mismo presupuesto (que pertenece a VIH) se ha transferido dinero de una partida a otra que es para cubrir medicamentos… por eso se lo pasaron a CENARES. Ese es el problema, pero no solo en VIH y tuberculosis sino un problema de presupuesto en general. Entonces, lo que nos queda es pelear para que se pueda incrementar el presupuesto en salud”, declaró Campos a Conexión Vida.
Carlos Arana Basto, coordinador del Grupo Nacional de Presupuesto Público (GNPP), también tiene sus dudas sobre la efectividad de esta transferencia. “No ha habido una mejora de recursos. Lo único es que se ha pasado es una transferencia de una unidad ejecutora a otra. Uno puede decir que lo óptimo, en este caso para los programas de VIH, hubiera sido que se haya, mejor, aumentado el presupuesto más aún cuando recién apenas estamos comenzando el año”, explicó el experto a Conexión Vida.
Entre los motivos de la reducción de 45 % para este año, tal como justificó el Ministerio de Salud en una carta (emitida el 20 de enero al grupo de vigilancia de antirretrovirales, GIVAR) se debe a que el Ministerio de Economía y Finanzas limitó los créditos presupuestarios bajo el criterio de costos unitarios, metas de cobertura, proyecciones de ejecución, capacidad de ejecución, etcétera. Adicionalmente, detalla el documento que de ser pendiente se solicitará una demanda adicional de gastos ante el Ministerio de Economía para la habilitación de mayores recursos presupuestarios.
Descarga la Resolución de transferencia financiera.
“Los presupuestólogos del Ministerio de Economía muchas veces no ven las carencias o las necesidades que requieren los servicios de salud. Se puede usar transferencia de recursos, pero cuando ya ha avanzado el año y se ve qué realmente es lo que se está gastando. Llama la atención que esta transferencia se aplique ahora porque aún faltan muchos meses para decir que esos 15 millones de soles se puedan requerir a lo largo del año y puede ser que, para ese entonces, ya no se cuente con más recurso porque se distribuyó”, cuestiona Arana Basto.
Queda claro que el presupuesto para el VIH sigue siendo limitado y no se incrementó ni un centavo, pese a que el Perú se comprometió a poner todos los esfuerzos para eliminar al Sida al 2030 en los acuerdos con los demás países del mundo.