En tanto, expertos peruanos indican que prioridad debe recaer en completar la aplicación de las dos dosis a la población en general.
Escribe Renato Arana Conde- Conexión Vida
Lima, Perú.- Mientras en el Perú las personas con VIH experimentan dificultades para acceder a la primera y segunda vacuna contra la covid-19, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, en sus siglas en inglés) recomiendan que las personas con inmunodepresión que se inocularon las dos dosis de las vacunas Pfizer y Moderna deberían recibir una tercera, al menos, cuatro meses después de sus predecesoras.
El pronunciamiento del CDC se basa en dos estudios realizados con personas hospitalizadas por covid-19, pese a que recibieron la pauta de vacunación completa.
Para tener este refuerzo el informe de la CDC señala que se debe priorizar a las personas con VIH que se encuentren sin tratamiento antirretroviral, con infección avanzada o con niveles bajos de CD4 (no obstante no se indica el número exacto en este último punto). Otro grupo vulnerable que se incluye son las personas que recibieron un trasplante de células madre en los últimos dos años, las que presenten alguna patología que cause inmunodeficiencia primaria grave (síndrome de DiGeorge o el de Wiskott-Aldrich), o aquellas en tratamiento con altas dosis de corticoides.
Esta recomendación se debe a que las personas inmunosuprimidas tienen una respuesta más débil a las vacunas contra la covid-19, lo que se traduce en una menor posibilidad de obtener niveles altos de anticuerpos con las vacunas Pfizer y Moderna, respecto al resto de inoculados con un sistema inmune sin complicaciones.
Primero completar las dos dosis en Perú
Para Juan Guanira, infectólogo de Investigaciones Médicas en Salud (INMENSA), si bien esta recomendación está basada en algunos hallazgos en las vacunas de Pfizer y Moderna no se tiene suficiente evidencia para que sea determinante la aplicación de una tercera dosis.
“A la larga, creo que todas las personas van a tener que vacunarse una vez al año y las personas que tienen el sistema inmunológico suprimido, al menos por ahora, darles un refuerzo a los 8 meses (tras la segunda dosis) sería una buena opción”, advirtió Guanira en diálogo con Conexión Vida.
En tanto, el infectólogo de EsSalud, Alberto Flores, aclaró que la vacuna covid-19, al no ser de naturaleza esterilizante, solo da protección individual al reducir el riesgo de desarrollar formas graves de infección, por lo que una tercera dosis para una población de 87 mil personas con VIH no resuelve el problema: “En el caso de Perú,
primero tienes que vacunar a toda la población porque ¿de qué sirve dar una tercera vacuna y tienes a la mitad de la población sin vacunar? Vacunas a un grupo (con VIH) contra el covid-19, pero luego están rodeados de un mar de gente con una gran carga viral al no estar vacunadas”.