Sucedió en Chimbote, gracias a que no abandonaron su tratamiento durante emergencia sanitaria; sin embargo, en otros hospitales del Minsa, a nivel nacional, se denuncia falta de antirretrovirales o entregas incompletas.
Lima, Perú.- En Chimbote, región Ancash, un total de 42 personas con VIH que se infectaron con coronavirus lograron recuperarse, tal cómo informó al Centro de Referencia de Infecciones de Transmisión Sexual (Cerits) de la referida ciudad.
Liliana Diestra Pastor, responsable del Cerits, explicó que la recuperación se debió en parte a que estas personas no interrumpieron su tratamiento antirretroviral durante la emergencia sanitaria por el Covid-19, por lo que lograron mantener un sistema inmunológico que pudo mantener a raya al coronavirus.
Como resultado, la mayoría de los 42 casos se reportaron como asintomáticos y se les pudo brindar servicio de teleorientación y teleconsejería para garantizar la continuidad de su terapia antirretroviral. “Esto permitió que sus defensas estén firmes y le puedan hacer frente al covid-19 con éxito; es una gran victoria”, destacó Diestra Pastor.
Denuncian desabastecimiento de medicamentos
No obstante, otras personas con la condición en el resto de regiones del país no cuentan con la misma suerte. A lo largo del estado de emergencia, se ha recibido denuncias por desabastecimiento de lamivudina, tenofovir, raltegravir y nevirapina en los hospitales del Ministerio de Salud y EsSalud, a nivel nacional, donde se brinda tratamiento antirretroviral.
Con ello se ven obligados a aceptar cambios de esquemas en sus terapias, con los subsiguientes efectos adversos que conlleva estas modificaciones en el organismo del usuario.
“Solo durante las dos primeras semanas de la cuarentena recibimos más de cuarenta denuncias de este tipo. En realidad, no se está cumpliendo con la disposición de garantizar tratamiento. Unos hospitales están entregando por un mes, otros para unas cuantas semanas”, detalla Marlon Castillo, coordinador del grupo de vigilancia de medicamentos para VIH, GIVAR.
Estas acciones de los principales operadores de salud pública del país contraviene a las recomendaciones de ONUSIDA de garantizar la entrega de antirretrovirales por, al menos, cada tres meses, así como no dejar de atender servicios médicos y prevención de VIH, durante la pandemia por Covid-19.
