App buscaría reducir el alto índice de automedicación y acercar el médico al paciente
Lima, Perú.- José Jurado Vera, egresado de Medicina Familiar y Comunitaria de la UNMSM e integrante del equipo de InkaDoctor, informó que el proyecto nació como una plataforma web hace 5 años, y que por el avance tecnológico, recientemente desarrollaron el aplicativo móvil. En esta primera etapa, alcanzaron una cobertura de atención a más de 350 personas, a nivel nacional.
Este seria el primer aplicativo en el Perú que busca de manera rápida, sencilla y cómoda, acercar el medico al paciente a través de consultas chat y vídeo llamadas (en tiempo real) para conocer qué medicina adquirir y así evitar la automedicación.
El 94% de peruanos adquiere medicamentos sin receta de un doctor.
Otro beneficio es la creación de un perfil del paciente. Es decir, se habilita una ficha de salud con datos de cada persona, como: vacunas aplicadas, alergias detectadas, medicinas habituales, antecedentes familiares sobre enfermedades e información médica para actuar ante cualquier emergencia.
Asimismo, la plataforma facilita la geolocalización, vale decir, ubicación de hospitales, clínicas, centros médicos y especialistas que se encuentran más cercanos al lugar que se requiere. Para acceder a estos beneficios basta con descargar, sin costo alguno, el aplicativo: InkaDoctor.
Si bien las consultas básicas son gratuitas, algunas atenciones personalizadas o de especialistas, tienen un costo que va desde los cinco a quince soles. El pago se efectúa a través de una tarjeta de débito o crédito, y el horario de atención es 24 horas del día, los siete días de la semana.
Cabe mencionar que recientemente, InkaDoctor, fue registrado en el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi).
Con el apoyo de la Incubadora 1551 Incubadora de Empresas Innovadoras de la UNMSM, el aplicativo InkaDoctor fue presentado en Brasil.
Al respecto, Luis Olivera Paredes, ingeniero industrial y miembro de InkaDoctor, precisó que en dicho país hay gran interés por desarrollarlo, principalmente en zonas rurales donde falta personal de salud, médicos y más aún, de especialistas. Una realidad similar a la que viven muchos pobladores en el interior en Perú.
