Perverso sistema de afiliación al Seguro Integral de Salud afecta a menor en fase Sida que necesitaba un subsidio gratuito del Estado
Escribe: Marlon Castillo / Conexión Vida
Lima, Perú.- Tener SIS ahora podría ser un privilegio inalcanzable. El seguro Integral de Salud, le negó la afiliación subsidiada a una menor de 12 años que se encuentra en fase Sida y con tuberculosis por la simple razón que no es considerada pobre extrema ni tampoco persona vulnerable, pese a su estado de salud y ser menor de edad.
El Padrón General de Hogares (PGH) que administra el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social y del cual depende la afiliación del Seguro Integral de Salud (SIS), consideró que la madre de la menor debería pagar un seguro contributivo, al verificar que el padre de la niña posee una casa antigua de tres pisos en un distrito denominado «pujante», pero sin considerar que la pequeña vive con su madre, luego de una separación conyugal y no tiene domicilio propio.
Al SIS no le importó el contexto en el cual vive la niña de iniciales B.M.C y actuó como un ente burocrático que desconoce el fin para el cual fue creado.
Ana, la madre de la menor de 12 años, contó en exclusiva para Conexión Vida que desde el 15 de noviembre, estuvo solicitando la afiliación de su menor hija al SIS debido a que se encontraba hospitalizada en el Instituto Nacional de Salud El Niño, donde los médicos le habían diagnosticado fase Sida.
Casi un mes le demoró a Ana afiliar a su hija para exonerar de los pagos diarios de hospitalización e intervenciones de la pequeña y tuvo que recurrir a colectivos de vigilancia y organizaciones no gubernamentales para que presenten el caso a la misma ministra de Salud, Patricia García e interceda con la ayuda.
«Gracias a Dios han habido personas que me ayudaron con el caso de mi hija y he tenido que suplicar al SIS para que me afilie sacando mi RUS ( Régimen único Simplificado) y pagando 4 meses de adelantado para que afilien a mi hija y sea de inmediato», explica Ana.
Niña lucha por su vida
Con un peso muy por lo bajo al normal de una niña de su edad y tamaño, B.M.C permanece en una cama del pabellón de infectología del Instituto Nacional El Niño desde el 5 de noviembre pasado.
«Mi hija esta en la fase final y tiene tuberculosis, sólo espero que se recupere», expresó doña Ana, quién dijo que la menor ingresó al Tratamiento Antirretroviral de Gran Actividad (TARGA) para lograr reforzar su sistema inmunológico y evitar que otros virus, hongos o bacterias se apoderen de su organismo.
¿Quiénes son vulnerables para el SIS?
El Seguro Integral de Salud (SIS), como organismo público ejecutor, del Ministerio de Salud, tiene como finalidad proteger la salud de los peruanos que no cuentan con un seguro de salud, priorizando en aquellas poblacionales vulnerables que se encuentran en situación de pobreza y pobreza extrema.
En el 2013 se promulgó la Ley N°30061 que declara de prioritario interés nacional la atención integral de la salud de los estudiantes de educación básica regular y especial de las instituciones públicas del ámbito del Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma y los incorpora como asegurados del Seguro Integral de Salud (SIS).
Sin embargo, el SIS jamás consideró este tipo de situación para B.M.C a quién no le consideraron vulnerable. Tampoco sabemos a qué tipo de población o personas, se les puede catalogar como vulnerables y bajo qué criterios.
Efecto Moreno en la Salud
Las afiliaciones al SIS subsidiado se están revisando para evitar filtraciones de personas que realmente no merezcan dicho servicio, tras el destape de corrupción del exasesor presidencial en asuntos de Salud, Carlos Moreno Chacón, quién desvió fondos del SIS para entidades privadas de atención en salud, donde recibiría dinero por ser intermediario.
Esta situación que desató la peor crisis del gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski, permitió que el SIS sea reestructurado y se forme una comisión para analizar las afiliaciones y ser más estrictos con las nuevas solicitudes de ingreso al seguro. No obstante, la mirada de calificación de pobreza y pobreza extrema o población vulnerable, sigue siendo el sesgo, donde tener un techo donde vivir, significa ser casi millonario.
Cualquier persona que desea afiliarse es sigilosamente empadronada y ante cualquier mínimo detalle, es considerado como no beneficiario, pudiéndose vulnerar el derecho a la salud de personas que realmente necesitan el seguro. El efecto Moreno, ocasionó sembrar un manto de sospecha para todo tipo de afiliación, por la que se torna lenta, compleja y a veces atentatoria a la propia dignidad del afiliado.
Si el gobierno, está reestructurando el sistema, debería empezar por mirar con atención sus procesos de afiliación y definir población vulnerable para no perjudicar a aquellas personas que realmente necesitan un seguro que les garantice el goce a una vida saludable.